He dirigido más de una docena de cursos grupales, lo cual me permite tener ya cierta experiencia, que me ha proporcionado una serie de herramientas para analizar contenidos y resultados. Veremos que, aunque la paciente pueda imaginar algunos inconvenientes a priori, se pueden convertir después en puntales para aumentar la exigencia personal y ser, precisamente, unos motivos para llegar al objetivo con más rapidez.

Suele suceder que la barajar la posibilidad de apuntarse a un curso grupal, pueden aparecer ciertos temores respecto a la eficacia del curso, al tipo de contenido, a cómo será el resto de la gente y a otros muchos factores que pueden hacernos retroceder ante la idea de hacer la inscripción, de una manera decidida.

Aquí os dejo mis reflexiones basadas en los múltiples correos y chats que he intercambiado estos últimos años.

Análisis de los puntos que pueden parecer “inconvenientes” cuando la paciente se plantea si hacer el curso o no.

.- Atención personalizada a la hora de trabajar en grupo. Pueden pensar que la atención de la terapeuta se divide entre todas las participantes y no se va a concentrar en cada una de las chicas. Y eso no es así, ya que se sigue un turno y hasta que cada una no ha solucionado sus dudas en el entrenamiento, no se pasa a la otra persona.

.- Sensación de vulnerabilidad al exponerse ante otras personas. Existe en ocasiones el temor de explicar ciertas intimidades a gente desconocida. Hoy en día no se da demasiado, pero si alguna es más tímida, enseguida se da cuenta de la empatía grupal y se integra rápidamente.

.-Someterse al compromiso de sesiones prefijadas en el calendario. No siempre se tiene la fuerza o la disponibilidad, para comprometerse un día a la semana, durante cinco sesiones. Pero no obstante se pueden acordar cambios o sesiones individuales, si hicieran falta.

.- Temor a hablar en público. Temen quedarse cohibidas y a no poder expresarse.  Rápidamente sedan cuenta de lo fácil que resulta, con un tema tan compartido.

.-Horarios especiales para Sudamérica. Estas participantes deben lidiar con horarios tempranos, pero por suerte tienen muy asumido el hecho de madrugar.

.- Temor a no seguir el ritmo del grupo, a quedarse atrás. A veces tienen la sensación de que su ritmo quizás sea más lento y que eso les podría hacer sentir mal en el grupo. En absoluto es así, ya que se respeta que cada persona tiene su ritmo.

Y estas serían algunas dudas que se plantean y me comentan antes de decidirse a hacer los cursos.  Una vez terminan, me confirman ellas mismas, gratamente, que todas esas dudas se desvanecieron en la primera sesión. Personalmente me gusta que se planteen ciertas cosas antes de tomar la decisión, porque eso quiere decir que esperan grandes resultados y no quieren equivocarse. Así que una vez han terminado las sesiones, su testimonio se decanta hacia la satisfacción del trabajo realizado. Y aquí os dejo algunas de las cosas que me cuentan.  

Análisis de las ventajas reales de los cursos grupales online

.- En cuanto a la periodicidad:  “Me ha ido muy bien personalmente el comprometerme una vez por semana a explicar mi trabajo personal.  Necesito disciplina y presión.  Creo que nunca me comprometí tanto conmigo misma.”

.- Compromiso por ambas partes, en cuanto a preguntar y a encontrar respuesta: “En todo momento he sentido que podía preguntar por diferentes medios de comunicación y siempre se me dio una pronta respuesta”

.- Compromiso total de la terapeuta: “Agradezco tanto la puntualidad de inicio en las sesiones, como que no tuvieran límite si se alargaban por algún motivo”·  

.- Acogida del grupo: “Nunca pensé que el grupo me apoyaría tanto al saber de mi ruptura de noviazgo.  Fue una experiencia brutal, en un momento en el que yo estaba hundida, a punto de tirar la toalla”

.-Recibir el Cuaderno de la Vaginista:  “Gracias por el Cuaderno, he encontrado respuesta a todo lo que necesitaba para hacer el tratamiento.  Es muy completo.”

.- Repaso semanal de las tareas antiguas y de las nueva: “Me ha gustado mucho la dinámica de las sesiones, empezando por las pautas de la semana anterior y pasando después a las nuevas de la semana”

.- Entusiasmo progresivo:  “Se iba notando, semana a semana, un entusiasmo que iba aumentando.  Y si alguna no sentía que su logro fuera muy grande, tenía ganas de trabajar más la próxima semana”

.- Deseos de superación colectiva: “Había el deseo de que todo el mundo superara sus retos, así que los correos se llenaban cada semana de buenos ánimos entre nosotras.  Estábamos atentas a las más necesitadas”

.- Participación en la red de apoyo: “Todas nos convertíamos en alumnas y a la vez en maestras.  Era una mezcla estupenda de aprendizaje.”

.- Ayuda de madrinas:  “Siempre estaré agradecida de la posibilidad que se nos brindaba al poder contactar con las madrinas.  Las nuestras eran lo más”

.- Aprendizaje del colectivo. “Parece mentira como en pocos días, pasamos de ser unas desconocidas, a sentirnos como amigas que navegábamos en el mismo barco y estábamos unidas. Aprendíamos también, las unas de las otras.  ¡Me pareció una idea muy potente!

.-Timing para conseguir el objetivo: ”Nunca pensé que fuera tan importante poner un tiempo límite para conseguir el objetivo.  Aprendí que era muy necesario y lo estoy aplicando en otras metas”

A partir del pasado octubre, que fue cuando empecé con los grupos online, he confeccionado una red de apoyo para quien lo necesite.  Se basa en hacer reencuentros de los grupos, para volvernos a ver y para detectar necesidades.  En este momento también las pongo en contacto con ANVAG (Asociación para normalizar el vaginismo) Me parece una muy buena manera de ampliar su círculo de conocimientos y recursos sobre el vaginismo.

Mis conclusiones son que cada persona tiene un ritmo, un tipo de vida y unas circunstancias.  Los grupos sirven para aprender, en primer lugar, qué es el vaginismo y para conocer los mecanismos de la resolución del problema, en un entorno empático, motivador y que desprende deseos de superación. Todo largo viaje empieza dando un primer paso… pero en el caso del tratamiento físico del vaginismo, no es tan largo el viaje. ¿Te vienes con nosotras?